Era una calurosa noche de diciembre...
todos dormían.. mientras la madre meditaba sobre ese ser que habia aparecido en su vida esa tarde.. tan inesperadamente.
Agazapada... caminando lentamente hacia su destino final... o no...
Esperó el tiempo necesario .para no espantarla.... para dejarla tranquila y relajada.... perdiendo la noción del tiempo
pasó mucho tiempo.. y asi y todo... nunca volvió a verla....
Sin embargo, con su recuerdo vivo... jamas podría retomar el sueño deseado....
Y asi es, que, al amanecer de las noches calurosas, se la escucha respirar suavemente cual brisa de mar .
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